Bajo el epígrafe “abogado negligencias médicas Barcelona” puedes encontrar un amplio listado de profesionales con experiencia en malas praxis hospitalarias, pero pocos especializados en casos de ictus. Un bufete que haya llevado procesos relacionados con accidentes cardiovasculares sabe que en el análisis de la historia clínica los tiempos son especialmente relevantes. Si el paciente no fue atendido adecuadamente en los primeros minutos o si no se siguieron a rajatabla los protocolos establecidos por el ‘código ictus’ podríamos estar ante un caso de negligencia y plantear una reclamación. El ictus no avisa, por ello cada segundo es fundamental para que el tratamiento surta efecto o las secuelas sean mínimas.
¿Qué es un ictus?
Un ictus ocurre cuando se detiene repentinamente el flujo sanguíneo al cerebro debido a la rotura o bloqueo de un vaso sanguíneo. Este evento, también conocido como derrame cerebral, infarto cerebral, embolia o trombosis, afecta gravemente la salud.
¿Qué es el protocolo o código ictus?
El código ictus es un sistema de emergencia diseñado para la detección temprana de los signos y síntomas de la enfermedad. El protocolo empieza desde que los servicios de emergencia reciben a la persona afectada y debe seguirse a lo largo de toda la cadena sanitaria.
La importancia del tiempo
El ictus es un accidente cardiovascular repentino y, por tanto, el tiempo de actuación es crucial. La detección temprana de los síntomas y la activación adecuada del «código ictus» son esenciales para aumentar las posibilidades de supervivencia y reducir las secuelas. El objetivo del «código ictus» es que el tiempo desde el inicio de los síntomas hasta la llegada al hospital con Unidad de Ictus sea menos de 2 horas. Esto permite que los pacientes se beneficien de terapias de reperfusión, extracción y cuidados especializados.
El 80% de los pacientes que ingresan a través del «código ictus» no presentan secuelas o tienen secuelas moderadas. De ahí la importancia de activar el protocolo a través de los servicios de emergencia.
No todos los hospitales cuentan con unidades de ictus y aquellos que las tienen no siempre están disponibles. Una llamada al 112 puede marcar la diferencia porque aquí sabrán orientar sobre los servicios hospitalarios cercanos e idóneos para el tratamiento.
Si has sido víctima de retrasos en la detección de un accidente cardiovascular o crees que no se ha aplicado correctamente el código durante la atención sanitaria, consulta con un abogado negligencias médicas Barcelona como el que encontrarás en el bufete de Aitana Sánchez. Su amplia experiencia en este tipo de casos y sus peritos especializados te ayudarán a emprender las acciones legales más convenientes y eficaces.